Debido a malas experiencias en las clases de inglés en el colegio, o con un profesor en el instituto de idiomas, muchos estudiantes piensan “el inglés no es para mí”, “no soy buena para el inglés” y otras creencias limitantes.
En este artículo voy a hablar de lo que se tiene que des-aprender para aprender inglés y así impulsarte a cuestionar tus expectativas sobre aprender el idioma para animarte a continuar con tus estudios de una forma más amena.
He recopilado 3 de los mitos más comunes que he escuchado de alumnos. ¿Alguno te suenan familiar?
1. “No soy bueno para inglés.”
¿Has pasado por varias clases de inglés? ¿Llevas años estudiando y sientes que no dominas el inglés cómo “deberías”?
Quizás, el problema sea el método con el que has estudiado y NO tu habilidad para aprender un segundo idioma. El método tradicional no funciona para todos, por eso es importante encontrar tu propia manera de aprender inglés, el que se alinee a tu estilo de aprendizaje, tus intereses, gustos y objetivos para que tu aprendizaje sea efectivo.
Además, como todo en la vida, necesitas constancia, dedicación y paciencia para lograr buenos resultados. ¡No necesitas ser perfecto!
Por lo tanto, reflexiona sobre tus expectativas y no seas tan duro contigo mismo. La exigencia no será la misma cuando aprendes inglés para aplicar a un trabajo en el extranjero, que aprenderlo para comunicarte con la pareja extranjera de tu hermana.
En el primer caso, necesitarás un nivel avanzado, mientras que en el otro, uno intermedio. Por eso no compares tu dominio de inglés con el de otros, porque no sabes el motivo, ni cuanto tiempo lo ha estudiado para llegar a donde está.
Cuál sea el caso, aún cometerás errores, por qué eso es parte del proceso y ninguno es mejor que el otro, son contextos distintos.
2. “Ya estoy muy viejo para aprender inglés.”
Cuando se piensa de esta manera, estás poniendo en duda tu capacidad de aprender algo nuevo. Por más que suene cliché, nunca es tarde para aprender.
Actualmente, hay estudios científicos que derriban el mito. Pero en esta oportunidad voy a mencionar las ventajas de aprender de adultos.
Si bien es cierto que si lo aprendes de pequeño tienes cierta ventaja, y más aún si lo adquieres en un país de habla inglesa, hacerlo de adulto también trae beneficios.
Un adulto, a diferencia de un niño, tiene conocimiento más amplio de vocabulario y capacidad para comprender conceptos abstractos y la teoría gramatical. Por eso, será fácil relacionar palabras y frases nuevas en inglés con las que ya conoces en español, permitiéndote recordar mejor lo aprendido.
Por otro lado, eres más consciente de tu proceso de aprendizaje y tienes mayor responsabilidad sobre lo que quieres o no quieres aprender.
La edad es un factor que no podemos controlar, pero lo que si podemos controlar es la manera en la que estudiamos. Conforme vamos creciendo, nos olvidamos de lo emocionante que puede ser retarnos a aprender cosas nuevas. Por consecuencia, se pierde rápidamente el interés, y la edad se usa como excusa.
Es fundamental buscar temas que despierten tu interés y aprender de ellos en inglés, a través de lecturas, videos y podcasts para que no pierdas la motivación.
3. “Me da vergüenza mi acento”
Aún existen prácticas discriminatorias en redes sociales y en televisión que hacen que un acento extranjero sea visto como algo incorrecto.
Pero debemos entender que el inglés es el idioma del mundo y es usado en diferentes lugares por millones de personas. Por tanto, existen muchísimas variedades del idioma que deben ser toleradas.
El inglés es el idioma más hablado a nivel mundial por aprox. 1500 millones de personas (Statista 2021). De ellos, aproximadamente 379 mil son nativos, mientras que el resto lo ha aprendido como segundo idioma. ¡Hay más hablantes de inglés como segunda lengua que nativos!
Por esta razón, el esfuerzo no debe estar en intentar cambiar tu acento, sino en mejorar tu pronunciación para que tu comunicación sea efectiva. Por ejemplo, aprender sobre la diferencia de los sonidos en las palabras shit y sheet, bitch o beach, si no se pronuncian de manera adecuada, el significado puede cambiar muchísimo. Be careful!
Para eso, no necesitas cambiar tu acento y parecerte a un “nativo” del idioma. Aplicando las técnicas correctas, lograrás pronunciar los sonidos más difíciles del inglés y evitar malos entendidos.
El inglés es la lingua franca; un medio de comunicación entre grupos de personas que hablan idiomas diferentes. Lo usarás para comunicarte con clientes de China, compañeros de trabajo remoto de Pakistán o con proveedores de Alemania. Abracemos esa diversidad de acentos.
Conclusión
Estas creencias se presentan como un obstáculo al momento de retomar o empezar de 0 el inglés. Por eso, el primer paso para aprender el idioma es romper los mitos sobre aprenderlo.
No te desanimes si sientes que alguien avanza más rápido que tú o que habla diferente a ti. Estás a tiempo de aprender y permitirte aspirar a nuevas oportunidades. El inglés te pertenece y a todos los que usan la lengua, no solo a los “nativos”.
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